martes, 26 de mayo de 2009

Canasta de Huevos


Que cada quien crea en lo que le dé su gana. Derecho sagrado. Pero cada vez más gente se empeña en llevar sus creencias, por descabelladas que estas sean, al nivel del conocimiento. Yo puedo decir que Pancho Pantera es el creador del universo, pero no puedo pedir que esto se incluya en la enciclopedia o en los libros de texto solo porque a mí me gusta la teoría y el peinado de Pancho. El hecho de que se crea algo con fervor no lo hace verdadero.
Alguna vez, en un foro de esos que tanto abundan en internet, leí a alguien que decía que todas las enfermedades humanas se debían al canto de los pájaros, y en ese mismo foro, otro celebraba esta opinión como un gran ejemplo de la diversidad de criterio. Esto no es criterio. Esta opinión está basada solo en el capricho o la ignorancia de un fulano. Yo no lo tomaría en cuenta para el desarrollo de tratamientos y vacunas.
Si cada quien escupiera lo que se le antoja o cree, no existiría la luz eléctrica o los vehículos a motor. No habría salud porque no habría ciencia médica. Cuando me doliera la espalda, alguien podría decir que se debe a una fase del planeta mercurio o al peso del ángel de la guarda. La ventaja del conocimiento científico es que se puede sistematizar; está organizado: Las mismas causas provocan los mismos efectos. Se puede comprobar su validez en cualquier momento y en cualquier lugar del mundo, tanto en Agua zarca como en Praga.
La cuestión es entender que si se está en presencia de un efecto, se pueden deducir las causas: Si se conoce la velocidad de un coche que va para Pedriceña y conocemos la distancia, podremos deducir el tiempo que tardara en llegar. El concepto de causa – efecto siempre pasa desapercibido a la hora de hacer juicios: si veo una luz en el cielo, díganme por favor ¿de dónde?, ¿de dónde saco que es una nave tripulada por seres de otro planeta? ¿En dónde?, ¿en que parte del razonamiento y de lo que veo – nomas una lucecita- están contenidas las premisas que implican su origen extraterrestre? Las luces pueden ser cualquier cosa, unas fáciles de explicar, otras no tanto, algunas imposibles y, también cabe la posibilidad, eso que ni que, de que sea una nave extraterrestre. Pero, ¿por qué de todas las explicaciones posibles –cientos tal vez- hemos de concluir que es una nave extraterrestre?
Volvemos a lo mismo una y otra vez, esta conducta se repite hasta el hartazgo: una mancha que pude ser de aceite, grasa, mugre, pintura, desgaste o ya saben, se vuelve la expresión divina de la silueta de la mismísima madre del creador del universo, y de una lucecita que se ve en el cielo, algunas personas que parecen sensatas concluyen que es una nave tripulada por extraterrestres la cual es impulsada con un efecto anti gravitatorio de distorsión espacial a base de impulsos electromagnéticos de taquiones generados con rayos de protones y que buscan humanos como conejillos de indias para perversos experimentos de mezcolanza genética con el fin de lograr una raza hibrida con planes de dominación mundial, que manejan la casa blanca y que además son creadores de las pinturas rupestres de Altamira. ¡Uff!

domingo, 24 de mayo de 2009

Dar A Los Que Menos Tienen.


Es un concepto muy humano y hermoso: Regalar el dinero a los pobres, esos que nada tienen más que su corazón abierto como un abrazo y su alma desteñida, casi trasparente, como quien la ha lavado muchas veces en la esperanza y la humildad.
Arrancar el capital de las tenazas del malvado rico que con sus malas artes basadas en las ciencias del demonio, esas que se ocupan de las cosas terrenales – economía, administración, finanzas y relaciones públicas- ha construido, sacrificando su tiempo y su trabajo, su imperio de codicia.
Quitemos el dinero a aquel que se levanta pensando en construir para darlo a aquel que se levanta pensando en contemplar la obra maravillosa de Dios, a aquel que junto a sus amigos y hermanos yacen todas, pero todas las tardes, disfrutando de la milenaria bebida del lúpulo, antes reservada solo a los faraones.
Ellos solo tienen sus sentimientos, que como el diamante, descompone la luz en una pléyade de brillos que iluminan sus espíritus enviados a esta tierra para enseñar la lealtad a sus semejantes. Así, toman como suyos los predios cuyo dueño original era el padre creador y no el terrateniente despojador cuya soberbia lo llevó a pensar en poseer una parte del universo.
Ellos solo tienen su orgullo de pobres, nacido de las enseñanzas de los grandes maestros como Luis Aguilar, Jorge Negrete y Pedro infante, que los protege de aprender y contaminar los cristalinos laberintos de su fe. Ellos solo tienen su orgullo de pobres que los cuida de un trabajo de responsabilidad ya que responsabilidad es responder, y solo se le responde a Dios. Ellos solo tienen su orgullo de pobres, que ensanchado con el agave, incentiva su bravura y coraje con el que enseñan a sus hijos y mujeres y también se van a la huelga.
Despojemos a los que crean hospitales, carreteras y empresas como fachada de su infinito deseo por tener, y demos el dinero a los pobres. Tal vez no lo sepan administrar debido a su poca formación, o lo gasten en enganches de cosas que no podrán pagar pero eso no importa. Salgamos a las esquinas a disfrutar la vida y junto a amigos y hermanos, con un buen tequila y cerveza, contemplemos todos juntos, hoy la luna y mañana el sol.

sábado, 23 de mayo de 2009

Igual Que Un Árbol



“He notado que las personas siempre sobreestiman lo que no son y subestiman lo que si son”
Jean Paul Getty.


¿De dónde venimos?... Esta pregunta siempre hace que se me revuelva el estomago. Es precisamente nuestra infinita vanidad. Esa que nos hace pensar que somos divinos y que el mismísimo creador del universo es igualito a Morgan Freeman la que también nos hace preguntarnos de dónde venimos: “Soy tan hermoso y agraciado que no puedo ser hijo de estos vulgares señores, les preguntaré quienes son mis verdaderos padres y seguramente resultaré hijo de un rey o un ángel”.
No venimos de ningún lado, es tan obvio. Hemos brotado de aquí mismo, tal como un árbol. Piensa que eres casi ochenta por ciento agua. El ochenta por ciento de lo que eres ha corrido bajo la tierra por grutas y cavernas; ha sido rio y ha sido mar y también ha estado en el cielo. Tus huesos están formados del mismo calcio de las rocas con las que se construyeron las pirámides, y el oxigeno que en este momento infla tus pulmones, ayer llenaba a los animales de la sierra. Estás compuesto de carbono, la materia prima del universo. Eres químico como las plantas, eres eléctrico como el rayo. Lo mismo que te compone a ti, compone a las estrellas y a los cometas.
Y ya que te gusta tanto aferrarte a la idea de ser divino: piensa que precisamente por todas esas cosas que te componen y por todos los procesos que se dan en ti, siempre has estado aquí, desde el principio de todo, y nunca te vas a ir; todo el universo esta dentro de ti y tú en todo el universo.

jueves, 21 de mayo de 2009

¡Lotería!



Un ex pandillero de los Ángeles – ahora un arrepentido de los Ángeles- se hizo un tatuaje de Santa Liboria en un brazo; dice que le salvo la vida.
La prueba inequívoca de tal hecho es que una vez, drogado y borracho, andaba con sus amigos mafiosos buscando a quien robar, o ya de perdido a quien golpear -la cosa, como siempre, era abusar de alguien más jodido- . Iban dos adelante y otros tres atrás en una camioneta van, de esas todas borroneadas que usan los cholos en la películas pochas.
Cuenta este amante de Santa Liboria, que él viajaba en el asiento del copiloto cuando de pronto y sin saber por qué, se le ocurrió decirle al tarado que venía justo detrás de él que si cambiaban lugares. Dice que de repente le entraron hartas ganas de sentarse con los de atrás y que por eso le pidió a su “compa” el cambio de lugares.
Total. Así iban, ya con los lugares cambiados, cuando cinco minutos más tarde, en el “stop” de una luz de semáforo, se encontraron con una pandilla rival con la que ya tenían una historia de enfrentamientos a balazos. Esta pandilla los atacó con ráfagas de "uzis" para luego salir hullendo: resultó muerto, en esta esquina de semáforo, el cholo que viajaba en el asiento del copiloto.
Para este arrepentido no hay otra explicación posible: Fue Santa Liboria la que lo salvó y lo hizo cambiar de asiento con su compa. ¿Quién sabe?. Tal vez. Pero a saber, tres fueron las acciones de la santita: A “Chuco” le salvo la vida, a la pandilla contraria dio la satisfacción de la venganza y a otro lo mató. No olvidemos que movió a uno del asiento fatal para salvarle la vida y a otro lo colocó ahí mismo para quitársela. Hubiera sido más fácil que Santa Liboria le hubiera metido muchas ganas al chofer de ir por otro camino o a lo mejor detenerse para cotorrear un rato, pero bueno: Los caminos de Dios son misteriosos. Las acciones de Santa Liboria me recuerdan el cuento de aquel que estando a punto de perder su mano derecha en una sierra mecánica, la quitó y metió la izquierda.
Ahora los familiares del muerto le rezan a Santa Liboria; piden por la salvación de su alma y el perdón de sus pecados.

martes, 19 de mayo de 2009

Como Correr Cien Metros en Nueve Segundos


De la autoayuda y las terapias falsas.


“No me digas gordo
porque bajas
mi autoestima”
La gente tarada.


“El dolor es inevitable;
el sufrimiento es opcional”
Buda.


Como me gustaria que se leyera este articulo con mucha atención (todos los que escribimos queremos lo mismo), pero seguramente estas trabajando, estas navegando mientras hay comerciales en la tele, o tienes un tiempo limitado; además, lo que a mi me gustaria no necesariamente es lo que a ti te gustaría, pero lo que escribo mas adelante se me hace importante. Creo que es una piedra fundamental para cimentar esta vida tan cortita que vamos a tener, y es sin lugar a dudas, un componente básico e indispensable de eso que llamamos “madurar”.


A lo largo de mi vida he observado estas tres cosas por las cuales me he decidido a publicar esta información que estoy seguro le va a servir a quien lo quiera entender.
La primera, no puede ser mas obvia. Si queremos solucionar un problema primero necesitamos saber cual ese se problema. ¿Parece obvio no? . Te sorprenderías ver cuanto gasta la gente tratando de solucionar un problema que no sabe de donde viene , ni como se produce. Estoy convencido - y así lo demuestran todas las metodologías usadas en investigación- que si se quiere dar solución a un problema cualquiera, es preciso en primer lugar, determinar y conocer las causas de fondo que lo provocan.

"No puede haber una solución si ni siquiera sabemos cual es el problema"
¿Estamos?...

La segunda es una afirmación que puede parecer simplista en primera instancia, pero te aseguro que no lo es:
"Las solución a tus problemas de carácter, es decir, a tus problemas internos, NO puede encontrarse, en ningún caso fuera de ti mismo" ¿Por qué? Porque las causas están adentro.

¿Tambien te parece obvio?... Pues este es todavía peor, a pesar de su simpleza parece que nadie lo entiende.
El desconocimiento de este principio es el origen de todas las cosas absurdas. Es totalmente desquiciado pensar que la solución a las cosas que pasan adentro esta en las cosas de afuera.

En mi vida he conocido muchas personas sumidas en alguna de las muchas terapias falsas basadas en creencias o tradiciones que no tienen estudio ni fundamento y que solo agravaron el problema provocando frustración al no reportar una mejora duradera

He visto en todos estos años, a un sin fin de personas colocar la responsabilidad de sus emociones en cristales, velas, piedras, aire, fuego, en rituales y en las cosas mas idiotas. Toda una vida de malos hábitos no va a cambiar con solo repetir un montón de veces: “me siento bien, me siento bien, me siento bien"

Esto viola el primer principio que enuncie: Conocer y atacar las causas; Viola también el segundo principio: La solución no está en un objeto o solución externa

El tercer principio es igual de obvio y lógico que los anteriores: Toda meta que se quiera logar requiere de trabajo. Si has de cambiar una piedra de lugar necesitarás de trabajo.

vLas cosas necesitan tiempo y la dedicación. Colgar un cristal en nuestro cuello o cambiar los sillones de lugar y esperar a que se produzcan cambios en nuestro carácter, equivale a prender una vela aromática o barrernos con pirúl y esperar al otro día para correr los 100 metros en 9 segundos.

Tú eres el responsable de tus propios sentimientos.

Ya. Se acabó. Eso es todo… así de sencillo –como todo lo bello, como todo lo cierto-

lunes, 18 de mayo de 2009

I Want to Believe



Hace poco veía en la tele a un cuate que daba las gracias a un santo -la verdad no me acuerdo cual- digamos San Régulo, por haber sanado a su mamá de un cáncer. Decía que durante cuatro años la señora había estado en tratamiento con uno de los mejores especialistas de México. Contaba con detalle todos los sufrimientos y sacrificios de la familia que se había visto obligada a vender una casa para pagar ese tratamiento, y finalmente, una operación muy delicada en una clínica particular de la ciudad de Monterrey.
Después de especialistas, tratamientos, operaciones y bienes raíces, él y toda su familia esperaron, rezando, los resultados de todo aquello. Al final y luego de que la señora siguiera un estricto régimen alimenticio y medicinal después de la operación, fueron a checar los últimos resultados de los exámenes de su mamá y he aquí el milagro de san Regulo: El cáncer había desaparecido.

viernes, 15 de mayo de 2009

HIGH TECH

Hay un efecto curioso en la naturaleza del hombre: Ante cualquier situación que requiera una explicación, siempre buscará no una que se ajuste a su razonamiento y tenga un sentido lógico (que es una forma de acercarse a la verdad) si no, la que mejor cuadre con sus necesidades y vacios emocionales.
HIGH TECH
Kor despertó del sueño que había comprado en el seven hacia dos noches, cuando se emitió un gran aguacero por parte del gran consejo. Quiso que las cortinas de plasma que su padre le había regalado aquella tarde en que el presidente había tomado protesta desde la nueva plataforma espacial dejaran pasar luz natural, pero tardaron un poco. Lo volvió a querer. Esta vez sí se abrieron; seguramente su interconexión neuroespacial ya estaba a punto de caducar.
Se sentía muy bien cuando se levantaba temprano pues estaba muy saludable, y como no estarlo, si las veinticuatro horas de todos los días, se monitoreaba su cuerpo en busca de cualquier signo de posibles enfermedades y se mandaban análisis rutinarios al centro encargado de anticiparse, o por lo menos atacar a tiempo, cualquier enfermedad.
Kor se sentía feliz, no solo gozaba de una salud perfecta, a sus 26 años había logrado tener todo lo que se desea a esa edad. Tenía un trabajo en la gran plataforma y podía viajar a cualquier lugar del mundo en muy poco tiempo con el vehículo de sistema taquiónico que había comprado apenas un mes atrás; además estaba enamorado. Pronto viviría junto a Rea Zimm y podrían ir a escoger la carga genética de sus dos hijos, que con una probabilidad del noventa y tres punto cuarenta y siete por ciento vivirían una vida feliz, así como el.
Después de su almuerzo al estilo de los años 50´ - siempre escogía esta opción. Siempre había sentido fascinación por el siglo veinte- Kor reflexionaba en todas las comodidades que le daba la ciencia y la tecnología. Desde las ropa que vestía, la manera en que se comunicaba con otros, el mobiliario de su casa y el auto que lo transportaba. Era bueno vivir cómodamente; vivir una larga vida sana y activa y estar dedicado solamente a su propia realización.
Kor termino de desayunar, y antes de abandonar su hogar para ir a la gran plataforma, se conecto a la red sideral con cierto apremio; no le gustaba salir a las calles sin haber leído su horóscopo.